BIZCOCHO DE POLENTA Y NARANJA

Feliz Sábado!! Aunque hoy no pensaba publicar  tenía tantas ganas de enseñaros este bizcocho que hice éste verano que al final me he decidido a hacerlo.

La primera vez que leí eso de polenta me sonó a chino, tengo que reconocer que no sabía que era, pero la pinta que tenía el bizcocho me hizo informarme de que se trataba, además tengo que amortizar mi colección de libros de repostería a la que pensaba que iba a sacar más partido y no está siendo así.

Me he propuesto utilizar más, así que prepararos para nuevos pasteles, bizcochos y demás que tengo pensado hacer ummmmm.

Os explico que es la polenta, harina de maíz así de simple, le da un toque "crujiente" al bizcocho que me encantó, buenísiiiimo y mis catadores oficiales también coincidieron conmigo. Tengo que deciros que es uno de los mejores bizcochos que he cocinado y pienso sacarle más partido a la polenta, ya he estado mirando que se utiliza también en salado así que ya os iré contando las recetitas que vaya haciendo. Ahhh éste bizcocho es totalmente apto para celiacos.

Ingredientes:

3 huevos.

110 gr.s de azúcar extrafino.

110 gr. de mantequilla fundida y fría.

1/2 naranja.

225 grs. de polenta.

1/2 cucharada de levadura.

1 pizca de sal.

1 cucharadita de vainilla (opcional)

Para el jarabe:

3 naranjas.

150 grs. de azúcar extrafino.

Preparación:

Batir los huevos y el azúcar hasta que cojan consistencia espesa, agregar la mantequilla fundida  y seguir batiendo

Pondremos la corteza rallada y el zumo de media naranja y batiremos de nuevo.

Incorporar ahora la polenta, la levadura, la sal y  la vainilla  y volver a batir un poco más.

En un molde que abremos engrasado pondremos la mezcla.

Horno precalentado a 160 grados, hornearemos unos 35 o 40 minutos, hasta que veamos que el  bizcocho está listo.

Vamos preparando el jarabe de mientras. Pondremos el zumo colado de las tres naranjas, la ralladura de una naranja y el azúcar en una ollita pequeña a fuego suave hasta que el azúcar se disuelva por completo. Cuando hierva bajar más el fuego y dejar hervir unos 5 minutos más.

Cuando el bizcocho esté ya hecho y aún caliente y sin desmoldar, pincharemos la superficie con un palillo y con ayuda de una brocha o cuchara iremos tirando el jarabe por encima para que empape bien, ser generosos con esto porque es lo que terminará de darle un toque delicioso al bizcocho. 




Dejar enfriar y desmoldar.

Yo aproveché las cascaras de naranja, aquí no se tira ná, y las pelé procurando que no tuvieran nada de parte blanca. Las corté en tiras muy finitas y las escaldé en un poco de agua hirviendo. Luego puse un poco de agua y azúcar al fuego y cuando se estaba formando el almíbar las puse dentro y las dejé cocer todo junto.

Las colé y en caliente las fuí rebozando en azúcar blanco.

Las puse para decorar pero también se comen  están muy ricas, ya os he contado antes que el bizcocho para mí salió perfecto todo y que os aconsejo que probéis. Si os gusta más el limón podéis cambiarlo y probarlo con ellos y me contáis a ver que tal ese cambio, me lo imagino también buenísimo.

Gracias por seguir mis recetas, también estoy en FACEBOOK.